El petróleo es la principal materia prima para la producción de lubricantes industriales. La transformación del petróleo en lubricantes es un proceso fascinante que involucra varias etapas. El petróleo crudo es una materia prima versátil que se utiliza para producir una amplia gama de productos, entre los que se encuentran los lubricantes.
La industria del refino tiene como finalidad obtener del petróleo la mayor cantidad posible de productos de calidad bien determinada. El petróleo crudo es una mezcla compleja de hidrocarburos, que son compuestos de carbono e hidrógeno.
En la refinería, el petróleo crudo se somete a una serie de procesos de refinación para separar los diferentes componentes según su peso y características químicas. Durante este proceso, se eliminan impurezas como azufre, agua y sedimentos, y se obtienen los compuestos que permiten la fabricación de muchos de los productos que empleamos en nuestro día a día.
Cómo es el proceso de transformación del petróleo en lubricantes industriales
El proceso de transformación del petróleo en lubricantes industriales se realiza en varias etapas, tal y como veremos a continuación.
Destilación
Todo comienza con la destilación fraccionada, proceso con el cual se separan las diferentes bases o componentes. El petróleo se calienta y se vaporiza. Los vapores se condensan en diferentes recipientes, según su punto de ebullición. Los hidrocarburos con menor punto de ebullición se condensan primero y los de mayor punto de ebullición se condensan después.
Como resultado de la destilación fraccionada, se obtienen diferentes grupos de petróleo, cada uno con características propias. Las fracciones más utilizadas para la producción de lubricantes industriales son las siguientes:
- Gasoil: se emplea para producir lubricantes de baja viscosidad, como los aceites de motor.
- Gasóleo pesado: se utiliza para lubricantes de viscosidad media, como los aceites industriales.
- Aceite pesado: para la fabricación de lubricantes de alta viscosidad, como los aceites para engranajes.
Refinación
Tras la destilación fraccionada, el petróleo se someten a un proceso de refinación. En esta fase, los hidrocarburos se separan en sus componentes más básicos con métodos como la destilación al vacío, la extracción con solventes o la isomerización.
Hidrogenación
En esta etapa, se añaden los átomos de hidrógeno a los hidrocarburos. La hidrogenación hace que los hidrocarburos sean más estables y que tengan mejores propiedades lubricantes.
Para la producción de lubricantes industriales se realiza con catalizadores, como el níquel o el cobalto.
Aditivación
No se puede subestimar el papel de los aditivos. Los lubricantes industriales reciben una dosis de mejoradores del índice de viscosidad, antioxidantes, agentes antiespumantes y agentes antidesgaste.
Tratamiento final
Los lubricantes obtenidos en la hidrogenación se someten a un proceso de tratamiento final para eliminar las impurezas de los lubricantes. Se lleva a cabo con métodos como la filtración, la centrifugación o la adsorción, garantizando que el lubricante cumpla con los estándares de pureza necesarios para su aplicación industrial.
Por tanto, la transformación del petróleo en lubricantes industriales implica una serie de procesos, desde la extracción y refinación del petróleo crudo hasta la fabricación y adición de aditivos especiales.
En el siguiente video, de Formación Industrial se muestra con detalles cómo es el proceso de refino, a través del cual se separan los diferentes componentes del petróleo en crudo y transformarlos en productos finales aprovechables en nuestra rutina diaria.
