La falta de materias primas y la subida de precios de los lubricantes industriales han sido los principales problemas que han afectado a la industria durante 2022. Un inconveniente al que LUFILSUR ha podido hacer frente gracias a su ‘plan de anticipación’, con el que ha podido dar respuesta a la demanda de sus clientes.
Un año en el que la entidad se consolida en Andalucía occidental como distribuidor de lubricantes y filtros industriales de referencia, sobre todo, en materia de fluidos refrigerantes para metalworking y lubricantes atóxicos de origen vegetal para la industria agroalimentaria.
Para hacer un repaso de cómo han sido los últimos meses y qué perspectivas se presentan para 2023, hemos entrevistado a Nicolás Martín, gerente de LUFILSUR.
Pregunta (P): Cómo ha sido 2022 para LUFILSUR, ¿qué balance haces de este año?
Respuesta (R): El año ha sido bastante bueno en cuanto al progreso de la empresa y consecución de objetivos. Hemos crecido de manera sostenida durante todos los meses del año, tanto en volumen de facturación como número de clientes, y seguimos ofreciendo servicios para pymes y afianzándonos como distribuidores de filtros y lubricantes de marcas de referencia internacional.
(P): ¿Cuáles han sido los hitos más importantes para la empresa?
(R): Uno de los hitos más destacados es nuestra consolidación en la industria de la alimentación, donde nos hemos posicionado como distribuidores principales de lubricantes de seguridad alimentaria y filtración de sus procesos. Otro punto clave para LUFILSUR es que continuamos siendo referentes para el sector metalworking, comercializando lubricantes más seguros y eficientes, que tienen el reconocimiento de fabricantes de sectores como el aeronáutico y el del automóvil.
También me gustaría destacar nuestra mejora en el área de logística, algo que nos ha permitido mejorar nuestra capacidad de respuesta a las necesidades de los clientes. En este aspecto, ha sido clave el respaldo que hemos recibido para nuestros proveedores.
Por último, destacar los nuevos acuerdos comerciales que hemos firmado y que nos permite distribuir marcas como Samoa, en cuanto a equipos de suministro de lubricantes; y herramientas Bahco.
(P): El año que dejamos, no ha sido fácil para entidades como la que diriges. La subida de precios de los lubricantes, los problemas de logística… ¿Cuáles han sido desde tu punto de vista los ‘problemas’ que más han afectado a los distribuidores de lubricantes y filtros industriales?
(R): Ha sido un año marcado por la falta de materias primas y la consiguiente subida de precios al consumidor. Nuestra entidad ha podido hacer frente a este problema trabajando con previsión, junto a nuestros clientes y proveedores, y esto nos ha permitido aminorar el impacto de los precios y la falta de producto.
(P): Uno de los retos que te planteabas para 2022 era el de consolidarse en el mercado andaluz y extremeño, ¿se está consiguiendo?
(R): En Andalucía occidental, sí lo estamos consiguiendo. En el resto del territorio andaluz y en Extremadura, nos está costando más, pero vamos dando pasos firmes.
(P): ¿Qué crees que va a marcar el mercado de los lubricantes industriales en 2023?
(R): Espero que sea un año con precios más estables, sin sobresaltos por falta de materias primas y con más avances en seguridad laboral y alimentaria. Pienso, además, que todo esto debe ser clave para la consolidación de productos sintéticos.
El cliente demanda productos que ofrecen seguridad
(P): ¿Qué productos son los más demandados?
(R): Los aceites minerales siguen estando en el top de ventas, principalmente por su precio, aunque los productos sintéticos siguen ganando terreno en el mercado. Por sectores, los lubricantes para metalworking y la industria alimentaria han sido los más demandados por nuestros clientes.
En cuanto a filtros industriales, el cliente pide aquellos que ofrecen más seguridad en los procesos, ya sean captadores de polvo, elementos para salas limpias, para dar seguridad al aire comprimido o a los procesos de líquidos.
(P): ¿En qué sector o sectores crees que se están dando lo cambios más importantes?
(R): Desde mi punto de vista, los cambios más destacados los está liderando el sector de la automoción, ofreciendo, por ejemplo, soluciones al vehículo eléctrico, a pesar de todo. Otro sector que está innovando es el metalworking, adaptándose a la reglamentación del uso de productos químicos, a pesar de los problemas que está generando la falta de materias primas, y poniendo en el mercado soluciones con rendimientos mecánicos iguales o superiores a los que tenían. Esto se une al empleo de nuevos materiales en los procesos de mecanizado, que cada vez son más exigentes con el lubricante.
(P): ¿Cuáles serán las novedades para la industria de lubricantes y filtros industriales?
(R): Creo que serán los productos sintéticos que ofrecen más eficiencia y seguridad, tanto en materia laboral como alimentaria. Por otro lado, en relación a las grasas, pienso que los fabricantes tienen que buscar alternativas que den respuesta a los problemas que están surgiendo con componentes como el litio, que está alcanzado un precio desorbitado. Tienen que encontrar un sustituto de este jabón para poder seguir siendo competitivos en un mercado tan exigente como es el de las grasas industriales.
«El sector de la automoción se enfrenta a los mayores retos»
(P): ¿Qué sectores crees que van a liderar las innovaciones más importantes?
(R): El de la automoción para solventar todos los problemas que le está generando el sector energético y, precisamente, el energético por esa ‘lucha’ de saber qué tipo de energía renovable y sostenible dominará el mercado.
(P): ¿Qué sectores piensas que se enfrentan a mayores retos?
(R): Sin duda, creo el de la automoción es el sector que tiene los mayores retos por delante porque tiene que definir por qué tipo de energía va a apostar y esto va a marcar la pauta a seguir para otros sectores.
Por otro lado, la industria del olivar y el metalworking tienen también importantes desafíos por delante. El sector oleícola en materia de la cantidad de contaminantes permitida al producto final. Y el del metalworking en cuanto al cumplimiento de la nueva normativa, cambio de materias primas y eficiencia de los lubricantes.
«Nuestro punto fuerte es la agilidad y capacidad de respuesta»
(P): Además de la comercialización de productos, LUFILSUR ofrece asesoramiento técnico. ¿Qué tipo de cliente demanda más este servicio?
(R): Principalmente, clientes del sector de la alimentación. Esta industria tiene una inquietud muy importante en materia de seguridad y en evitar cualquier tipo de problema que amenace la salud de los consumidores.
También desde el sector aeronáutico, los principales fabricantes marcan las tendencias y los usuarios nos solicitan bastante información sobre el uso y mantenimiento de las taladrinas y aceites de corte con el fin de ser más eficientes, consumir menos herramientas y generar el menor residuo posible.
(P): ¿Qué puntos fuertes tiene LUFILSUR que le permite marcar la diferencia en un mercado tan competitivo?
(R): Nuestro punto fuerte es la agilidad y capacidad de respuesta que tenemos, así como la diversidad de productos y servicios que ofrecemos a los clientes en comparación con nuestros competidores, sobre todo cuando hablamos de pymes.
(P): Que LUFILSUR siga creciendo y posicionamiento en el mercado en parte es gracias a la confianza que los clientes tienen en vuestros productos y servicios. ¿Qué les dirías?
(R): Les doy las gracias por abrirnos las puertas de sus empresas y decirles que para LUFILSUR no son clientes, sino compañeros de viaje de los que también aprendemos. Nuestro objetivo es ayudarles para que sigamos creciendo juntos.