En sectores como la construcción, la minería o el transporte marítimo, los cables de acero no son simples componentes, sino piezas fundamentales que soportan cargas intensas y soportan condiciones extremas.
Para quienes trabajan en estas industrias, mantener estos cables en óptimas condiciones no es opcional: es una necesidad que impacta directamente en la seguridad, la eficiencia y la continuidad de las operaciones. Por tanto, la lubricación es esencial en el mantenimiento preventivo de estas piezas.
¿Por qué hay que lubricar los cables de acero?
La fabricación de cables de acero incluye un tratamiento inicial con lubricantes para facilitar su manipulación y protegerlos temporalmente. Sin embargo, este primer recubrimiento tiene un alcance limitado. A medida que pasan los meses, sobre todo en ambientes hostiles o en condiciones de almacenamiento prolongado, este lubricante pierde efectividad. ¿El resultado? Un cable más vulnerable al desgaste y a la corrosión.
La solución radica en una lubricación periódica adecuada. Diversos estudios han demostrado que un buen mantenimiento puede prolongar la vida útil de un cable hasta ocho veces más en comparación con uno desatendido. Este dato, por sí solo, ilustra la importancia de integrar la lubricación en los planes de mantenimiento regulares.
Cómo actúa la lubricación en los cables de acero
Un cable de acero es más que un conjunto de hilos entrelazados; es un sistema dinámico. Cada vez que el cable se flexiona sobre una polea, un tambor o soporta cargas dinámicas, los hilos se mueven entre sí, generando fricción interna. Este desgaste puede acelerarse si no hay una capa de lubricante que reduzca la abrasión.
Además, los cables están constantemente expuestos a elementos externos como humedad, polvo y contaminantes químicos. Estos factores contribuyen al deterioro, especialmente en aplicaciones marítimas o industriales donde el aire salino y los productos corrosivos son una constante. La lubricación no solo minimiza el desgaste interno, sino que actúa como una barrera protectora frente a estas amenazas externas.
Como indicábamos al principio, mantener en buenas condiciones los cables de acero es clave para garantizar la seguridad y su eficiencia en condiciones exigentes. Una lubricación adecuada:
- Reduce el desgaste por fricción: el lubricante protege las capas internas y externas del cable, minimizando la abrasión entre los hilos.
- Protege frente a la corrosión: crea una barrera que impide la penetración de agua, sal y contaminantes, prolongando la integridad estructural del cable.
- Mantiene la flexibilidad: un cable rígido es más propenso a romperse. La lubricación permite que este conserve su capacidad de flexión, especialmente en aplicaciones dinámicas.
- Mejora la eficiencia en carga: un cable en buen estado soporta mejor las tensiones y reduce el riesgo de averías o fallos.
Elegir el lubricante adecuado según la aplicación
No todos los lubricantes son iguales. La elección depende del entorno y las condiciones específicas de trabajo. Aquí algunos ejemplos:
- Lubricantes penetrantes: idóneos para cables que operan en ambientes secos y con baja exposición a la corrosión. Su textura ligera permite llegar a las capas internas del cable, reduciendo eficazmente la fricción.
- Grasas de alta adhesividad: en aplicaciones marítimas o ambientes húmedos, estas grasas son ideales. Su resistencia al lavado por agua las hace perfectas para proteger los cables frente al agua salina.
- Lubricantes con inhibidores de corrosión: idóneos para entornos agresivos, como industrias químicas o zonas costeras. Estos productos combinan una lubricidad efectiva con una protección química frente a agentes corrosivos.
- Lubricantes biodegradables: en ambientes externos estos lubricantes ofrecen una protección ambientalmente responsable sin sacrificar rendimiento.
Cómo aplicar correctamente el lubricante
Un error común en el mantenimiento de cables de acero es aplicar el lubricante superficialmente, pensando que basta con cubrir las capas externas. Para que el producto haga bien su función, debe penetrar hasta el interior del cable.
Los equipos de alta presión son una ayuda muy práctica para garantizar una distribución uniforme del lubricante en todas las capas. Asimismo, es recomendable inspeccionar periódicamente el estado del cable y renovar el lubricante según sea necesario, especialmente en condiciones de alta humedad o exposición a salinidad.
La lubricación como parte del mantenimiento preventivo
Una de las principales amenazas para los cables de acero es la corrosión. Este proceso puede comenzar con pequeñas picaduras en la superficie (pitting), debilitando poco a poco la estructura metálica. Si no se controla, la corrosión compromete tanto la flexibilidad como la resistencia del cable, aumentando el riesgo de fallos.
Un ejemplo se observa en plataformas petrolíferas, donde los cables están expuestos al aire marino y a contaminantes químicos. En estos casos, el uso de lubricantes con inhibidores de corrosión es imprescindible para mantener la operatividad de los equipos y garantizar la seguridad de las operaciones.
El mantenimiento de los cables de acero no es solo una cuestión técnica; es una inversión estratégica. Un cable bien lubricado no solo dura más, sino que también minimiza el riesgo de accidentes y reduce los costes operativos a largo plazo.
Crear un calendario de mantenimiento, adaptado a las condiciones específicas de trabajo, es esencial para maximizar los beneficios de la lubricación. Esto incluye inspecciones visuales regulares, pruebas de carga y el cambio de lubricante en intervalos definidos.
En LUFILSUR, contamos con una amplia gama de fluidos anticorrosivos, que comercializamos en Andalucía y Extremadura. Además, ofrecemos asesoramiento técnico para la lubricación y el mantenimiento de la maquinaria que se emplea en los diferentes sectores industriales a los que dirigimos nuestra actividad.
Ahora también puedes adquirir nuestros productos a través de nuestra tienda online.
Si tiene interés en nuestros productos y/o servicios, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Estaremos encantados de ayudarte.
Portada: Imagen de fanjianhua en Freepik