Las cajas de engranajes son componentes esenciales en una amplia gama de equipos industriales, desde vehículos de motor hasta turbinas eólicas. Su función principal es transmitir y modificar el par motor, permitiendo el movimiento eficiente de las máquinas.
La lubricación juega un papel fundamental en el correcto funcionamiento de las cajas de engranajes, ya que reduce la fricción y el desgaste, protege contra la corrosión y ayuda a disipar el calor.
La selección del lubricante correcto requiere una serie de consideraciones técnicas específicas. Examinemos algunos aspectos clave, que debemos tener en cuenta, para garantizar una lubricación eficaz y un rendimiento óptimo de las cajas de engranajes.
Factores a tener en cuenta para la selección del lubricante para cajas de engranajes
La elección del producto indicado para la lubricación del reductor o caja de engranajes depende de diferentes factores. Por una parte, tenemos que tener en cuenta sus características técnicas:
Tipo de engranaje: helicoidales, cónicos, planetarios... Cada tipo tiene necesidades específicas.
Temperatura de servicio: el lubricante debe mantener su eficacia en el rango de temperaturas de trabajo.
Carga transmitida: a mayor carga, más capacidad de protección necesita el lubricante.
Y, por otro lado, no podemos pasar por alto la vida útil del lubricante y las condiciones ambientales a las que está sometida la caja de engranajes, tales como:
Contaminación: polvo, agua, productos químicos... El lubricante debe proteger contra agentes externos.
Humedad: el agua puede afectar las propiedades del aceite.
Vibraciones: el lubricante debe ser capaz de soportar vibraciones sin perder su eficacia.
Los nuevos diseños de reductores, si bien son más compactos, generan mayor presión en los dientes de los engranajes y temperaturas más elevadas. Estas condiciones mecánicas exigen el uso de productos que:
- Soporten altas cargas y protejan contra el pitting, micro-pitting y desgaste prematuro.
- No afecten a otros elementos como rodamientos, retenes o pintura interior.
La respuesta efectiva a estos requerimientos físicos se consigue con el uso de lubricantes de alto rendimiento sintéticos, formulados con aditivos de última generación. Estos productos no solo incrementan la vida del equipo, sino que además mejoran su eficiencia con el consiguiente ahorro energético.
Ventajas del uso de lubricantes sintéticos para cajas de engranajes
El uso de lubricantes sintéticos aporta una serie de ventajas si lo comparamos con los minerales, tal y como se muestra en la siguiente tabla:
Bajo coeficiente de fricción | Menor consumo de energía, menores costes de operación y mantenimiento. |
Menor desgaste y mayor vida útil del equipo | Aumento de la eficiencia y reducción de costes. |
Intervalos de cambio de aceite más prolongados | Se reduce al mínimo el consumo de lubricante, se reducen las cantidades de aceite usado, se reduce el coste de eliminación del aceite usado y se reducen las paradas de producción. |
Apostar por lubricantes sintéticos en estas aplicaciones no solo garantiza un mejor rendimiento y una mayor durabilidad del equipo, sino que también conlleva una optimización de los costes operativos y de mantenimiento, lo que se traduce en una ventaja competitiva significativa para las empresas.
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