Las grasas para husillos son fundamentales para el funcionamiento adecuado de estos componentes y para mantener en buen estado las cosechadoras. En la puesta a punto de la maquinaria agrícola, la revisión y lubricación de piezas son aspectos prioritarios que no deben dejarse a un lado. Así, prestaremos especial atención a elementos como los husillos, que están más expuestas a un desgaste por uso en las cosechadoras.
Gracias a su formulación con aceites muy refinados y aditivos anti-desgaste, las grasas para husillos de las cosechadoras evitan la abrasión y prolongan la vida útil de las piezas, que están sometidas a mucho desgaste debido al continuo contacto metal con metal.
Con el empleo de estos lubricantes industriales, garantizamos el máximo rendimiento al reducir el desgaste en estas superficies metálicas.
¿Cómo funcionan las grasas para husillos?
El diseño de la lubricación de las máquinas cosechadoras se basa en un engrase a pérdida. Por ello, debemos tener en cuenta la versatilidad del producto que tenemos que utilizar, que será una grasa lubricante todo en uno:
- Lubricante para engranajes.
- Aceite penetrante.
- Protector contra la corrosión.
En cuanto a las características de estas grasas para cosechadoras, destacamos las siguientes:
Son grasas con penetración NLGI No. “00”. Presentan un aspecto de grasa semifluida, que les hace lubricar lo necesario sin que el consumo sea excesivo a través de los cojinetes de la barra.
Son aditivos antidesgaste e inhibidores de la oxidación que reducen el desgaste y protegen los ejes y componentes de la unidad de recogida de algodón mientras la máquina está inactiva durante la temporada baja, consiguiendo prolongar la vida útil de todas las piezas de la unidad.
Son grasas fabricadas con jabón de base de litio, que mantiene el aceite en suspensión frente a otros jabones. Otros tipos de jabones pueden formar depósitos o «apelmazamiento» en las barras de recogida de algodón, evitando que la grasa lubrique el conjunto de la barra.
Con su empleo se impide que la suciedad, el agua y otros contaminantes entren en los rodamientos y otras piezas que se lubrican. Así mantenemos limpios los husillos y evitamos operaciones de mantenimiento costosas y paradas inesperadas.
Los aceites base empleados para fabricar este tipo de grasas son aceites altamente refinados. Este tratamiento garantiza un excelente rendimiento y lubricación en temperaturas de funcionamiento extremadamente altas sin que caiga la viscosidad.
Las grasas para cosechadoras deben ser lubricantes tres en uno. En su elección no debemos sacrificar calidad por precio.
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