Recientemente, la Asociación Española de Lubricantes (ASELUBE) ha publicado su informe sobre la evolución del mercado de lubricantes en España. El artículo firmado por Gabriel López, presidente de la Comisión de Estadísticas de ASELUBE, destaca 2024 como la recuperación de este sector, consolidando la tendencia positiva que comenzó en la segunda mitad de 2023.
Este estudio revela que, a pesar de las dificultades económicas globales, la industria ha logrado superar obstáculos y crecer un 1,1% respecto al año anterior. En particular, los lubricantes de proceso, que han experimentado un incremento del 12,8%, están jugando un papel clave en esta recuperación.
Como distribuidor de lubricantes, considero que estos datos son una buena señal. A pesar de los altibajos del mercado, la industria sigue avanzando. Sin embargo, este crecimiento no es homogéneo. Aunque la automoción y la industria tradicional muestran una ligera desaceleración, los lubricantes de proceso, que ahora representan el 16% del mercado frente al 14,3% en 2023, están impulsando una diversificación hacia productos más especializados. Esto es algo que los profesionales de este sector no podemos pasar por alto a la hora de diseñar nuestro plan de actuación.

Fuente: ASELUBE. Lubricantes News. Marzo 2025.
Adaptación y anticipación
Con la estabilidad y recuperación del mercado llegan también nuevos retos. Para aprovechar este momento de crecimiento, es importante adoptar estrategias que nos permitan ser más competitivos y ofrecer un valor diferencial a nuestros clientes.
La creciente demanda de lubricantes de proceso refleja el auge de sectores que requieren soluciones más tecnológicas y adaptadas a sus necesidades específicas. Como distribuidores, esto nos exige estar al tanto de estos cambios para ofrecer productos que no solo satisfagan sus expectativas, sino que también contribuyan a mejorar su sostenibilidad y eficiencia.
A pesar de los repuntes observados en el segundo semestre de 2024, los primeros trimestres estuvieron por debajo de la media histórica, especialmente el primero. Este comportamiento estacional, señalado también por ASELUBE, subraya la importancia de anticiparse a los picos de demanda y a los períodos de menor actividad. Estar preparados para estos ciclos nos permitirá ajustar nuestras estrategias de manera más eficaz y aprovechar las oportunidades cuando se presenten.

Fuente: ASELUBE. Lubricantes News. Marzo 2025.
Sostenibilidad, apuesta de futuro
La sostenibilidad sigue siendo uno de los principales motores de la industria, como destaca ASELUBE en su informe. Sectores dinámicos, como el de los lubricantes de proceso, exigen cada vez más soluciones respetuosas con el medio ambiente.
Como distribuidores, debemos priorizar productos que no solo optimicen el rendimiento de las máquinas, sino que también minimicen su impacto ambiental. Apostar por lubricantes biodegradables o de baja toxicidad es una forma de responder a las demandas de este mercado.
Este panorama refleja una recuperación y transformación del mercado de lubricantes en 2024. En mi opinión, los distribuidores debemos aprovechar esta oportunidad para implementar estrategias que nos ayuden a avanzar y adaptarnos a este nuevo contexto.
Fortalecer la relación con los clientes: ofrecer un servicio personalizado, basado en el conocimiento profundo de sus necesidades y en recomendaciones que mejoren la eficiencia de sus procesos.
La digitalización es clave: debemos utilizar las nuevas tecnologías para optimizar nuestros procesos logísticos, mejorar la gestión de inventarios y agilizar el servicio.
Formación continua: mantenernos al día sobre los avances tecnológicos y las mejores prácticas de lubricación para mantener nuestra competitividad en un mercado tan especializado.
Diversificación de productos y servicios: no se trata solo de vender lubricantes, sino de ofrecer un servicio integral. Esto incluye desde el suministro de filtros o productos de mantenimiento, hasta el asesoramiento técnico.
La recuperación del mercado de lubricantes en 2024 es, sin duda, una buena noticia, pero no podemos quedarnos de brazos cruzados. Debemos estar preparados para lo que se avecina. El futuro será, sin duda, más sostenible y tecnológico, y como distribuidores, debemos anticiparnos a estos cambios con soluciones adaptadas a las nuevas demandas.